Sabido es por quien me conoce un poquito, que no soy gran fan de las graaaandes marcas, por el contrario, me gusta lo innovador, lo genuino, lo diferente, lo alternativo, lo particular, lo peculiar, y sobre todo, la gente grande que se cree pequeña... Una gran parte de mi tiempo libre lo intento dedicar a la búsqueda y selección de gente que lleva a cabo productos con esas premisas, no siempre pensando en la Cleopatra, porque 50 metros cuadrados no lo podrían abarcar trodo... lo hago símplemente por pura afición, devoción y hobby.
Este viernes pasado, a sabiendas de lo iba a encontrar, estuve en la feria The Brandery Winter 2011 la feria de la moda urbana y contemporánea de Barcelona... con todas las marca habidas y por haber. Vi un pase de modelos de una pequeña gran marca, que me gusta muchísimo, Ian Mosh, y me chocó ver el 'backstage' abierto al público donde peluqueras, maquilladoras y organizadoras iban, perdón por la expresión, de puto culo. Creo que había más gente mirando la trastienda que la pasarela en sí, supongo que nos resulta llamativo porque es un mundo del que estamos menos informados y tenemos la impresión de que sea mucho menos glamuroso pero que resulta impactante ver el trabajo de todos esos profesionales invisibles que se juntan en un espacio super reducido, con ruido de secadores y voces chillonas para llevar a cabo verdaderas obras de arte. En otra parte de la feria, había un espacio dedicado a algo que nada tenía que ver con la moda, pero sí con sus diseñadores, y es que hicieron una pequeña exposición de artículos que usamos a diario pero "tuneados" por marcas de renombre, como por ejemplo un carrito de bebé de Carolina Herrera, una moto de Custo, unos pastelitos de Jonh Galliano, un caviar de Yves Sant Laurent o una botella de Martini de Dolce & Gabbana. Todo un poco recargado a mi parecer, pero me gustó la propuesta y la manera en que estaba expuesta. Y lo que más me gustó fueron las propuestas de escaparates de las escuelas de diseño de Barcelona. Ay! Si tuviera 20 años ahora en vez de hace 15...
Un día diferente que nunca viene mal...
No hay comentarios:
Publicar un comentario