DIA SETENTA Y SEIS. Me encanta esta entrada!!!!

Qué contenta estoy!!!!
Como sabéis más abajo hay una entrada de un relato que se me pasó por la cabeza... (de echo es una historia que sigue... algún día pondré algún trocito más...) y como sabéis también, en mi "perfil" está mi correo para que me mandéis lo que queráis de forma un poco más privada. Pues bien, el otro día me encuentro con este relato de una chica que se llama Maribel, que vive en Irlanda y que conoce la tienda porque ella es de Barcelona.
Aquí os lo adjunto (me ha dado permiso para ello) espero que os guste tanto como a mí:
Tengo las manos frías, el corazón caliente y el cerebro a mil…que mala combinación! Que hace una chica como yo en un sitio como este… pregunta que seguramente más de una se habrá hecho a lo largo de su vida. Lo malo de preguntártelo hoy en día es que el concepto “sitio” se extiende al mundo mundial que hace tiempo ya que se volvió Reloco. Y como tengo las manos frías me ha dado por escribir haber si se me calientan o si por aquello de las casualidades lo que piensa mi cerebro consigue traducirse en algo lucido sobre (maybe) papel mojado. Y es que yo pienso a mil, y mil cosas diferentes a una velocidad pasmosa y luego se me olvida. Me digo a mi misma, que buena es esta idea, miro a la izquierda y me viene otra idea a la cabeza, y hay! ya no me preguntes cual era primera porque se me olvido! Y a estas que digo yo, que malo es el olvido Señor. Eso decía un Señor que venia de Murcia y que no sabia donde iba y que me encontré en un tren, que empezó hablarme (yo sin saber porque) y que se bajo en una estación llamada Olvido. ¿Se referiría a eso? A que su pueblo era un horror. ¿O al olvido de la memoria? Quien sabe, no? Que paradojas de la vida. Allí me quede yo pensando a que se refería y un poco mas y se me olvida bajarme en mi parada! Hay que malo es el olvido Señor. No se si es peor olvidar o que te olviden. Cuando todos olvidamos si queremos, o queriendo o sin querer guardamos un poco de recuerdos, buenos y malos, en un cajón trasero de la memoria, creo que se llama subconsciente… no me hagan caso que lo mío no es la memoria. Serán lo años, será el delirio, será el Amor! Yo ya llegue a la conclusión que con tanta fluidez de información que uno recibe al día mi cerebro no da para mas, borro lo que no me interesa: penas, disgustos y sin sabores; pero debe ser que el cerebro (muy pillo él) lo guarda en el disco duro (para que no se te olvide que tienes un pasado…) y de vez en cuando me asalta una sensación de tristeza o de melancolía o morriña y me viene el Recuerdo. Recuerdo olvidado conscientemente y a propósito pero parece ser sin éxito. Me regodeo unos momentos para ver si realmente me acuerdo bien o tengo lagunas. Pero vaya que vaya si me acuerdo! Maldición la mía, lo digo en serio, de tener buena memoria para lo innecesario. Castigo de Dios que dirían las abuelas. Castigo el mío. Que malo es el olvido que no se olvida. Y que le voy hacer así dicta mi sinrazón… acuérdate de lo olvidado y recuérdate de volverlo a olvidar… Que si no sabes de qué hablo, o perdiste el hilo, no te preocupes mi cielo, no todo esta perdido si acaso Olvidado. Ya volverá. Maribel. Inspiración en un día de lluvia.

No hay comentarios: